El Presidente pone en marcha las obras del gasoducto Néstor Kirchner
Alberto Fernández visita las operaciones de la petrolera YPF en la provincia del Neuquén. En el área Loma Campana darán comienzo a una construcción fundamental para ampliar la capacidad de transporte del gas.
El presidente Alberto Fernández arribó poco antes de las 13 al Aeropuerto Internacional Juan Domingo Perón de Neuquén, desde donde se trasladó al yacimiento Loma Campana de YPF en Vaca Muerta para dar comienzo a la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
El mandatario fue recibido en el aeropuerto por el gobernador Omar Gutiérrez, y su par de La Pampa, Sergio Ziliotto.
El acto en Vaca Muerta cuenta también con la presencia del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y del presidente de YPF, Pablo González.
En tanto, de manera virtual, participará desde la ciudad de Washington el ministro de Economía, Martín Guzmán.
Por la tarde, el presidente entregará 90 viviendas en el Barrio Covicir de la ciudad de Neuquén.
Forman parte de la comitiva oficial el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi; los secretarios General de la Presidencia, Julio Vitobello; de Energía, Darío Martínez, y de Hábitat, Santiago Maggiotti; la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti; el secretario general de la Federación de Trabajadores de la Industria del Gas Natural, Guillermo Mangone, y el diputado nacional Julio Pereyra, según se informó oficialmente.
Nueva ronda del Plan Gas.Ar
A partir del lanzamiento del nuevo gasoducto troncal, el secretario de energía, Darío Martínez, aseguró que el Gobierno nacional analiza lanzar una nueva ronda del Plan Gas.Ar para generar un horizonte a las inversiones de las petroleras interesadas en el nuevo escenario que abrirá la obra.
«Estamos estudiando una nueva ronda del Plan Gas.Ar para los nuevos volúmenes que permitirá transportar el nuevo gasoducto», dijo Martínez, en declaraciones de prensa en medio del proceso de lanzamiento de la licitación de la obra que demandará una inversión estimada en más de US$ 1.500 millones.
Martínez expresó que «el mecanismo a elegir depende de factores tales como los momentos de puesta e servicio de las nuevas obras, y sus distintas etapas, los volúmenes asociados a cada momento de la obra y su capacidad objetiva de transporte, y los tiempos necesarios para que la industria realice sus inversiones y genere la producción adicional necesaria».
En este sentido, el funcionario destacó que «el desafío de todo el sector es realizar este esfuerzo productivo adecuada y coordinadamente con el ritmo de la ejecución de las obras que lidera y están a cargo de IEASA, para obtener el mejor resultado posible en materia de sustitución de importación de GNL y gas oil, con gas argentino».
Martínez explicó que los resultados positivos en el incremento de la producción se inscriben en una segunda etapa de medidas como el inicio de la construcción del gasoducto Néstor Kirchner y el conjunto de obras del Sistema de Gasoductos Transport.Ar Producción Nacional.
«El gasoducto es una obra estratégica que va a generar un círculo virtuoso para que se siga incrementando la producción, que haya más gas para las industrias y más trabajo para los argentinos, además, nos permitirá ahorrar divisas que hoy se destinan a la importación de GNL».
Además del emblemático gasoducto Néstor Kirchner como obra principal, el Sistema de Gasoductos Tranport.Ar Producción Nacional implicará la ampliación del Gasoducto NEUBA II (Ordoqui), la construcción de los tramos finales en AMBA Sur y Norte, la reversión del Gasoducto Norte en sus etapas I y II, y la ampliación del Gasoducto Centro Oeste.
A la vez, las empresas productoras detallaron a la Secretaría de Energía y a los representantes de la industria el estado y las expectativas de inversión y producción de cada una de ellas, aseguró la cartera energética tras una reunión de Martínez con representantes de la Unión Industrial Argentina y las petroleras.
Todas coincidieron en que para este año han aumentado sus volúmenes de producción e inyección al sistema, que desde fines del 2021 vienen cerrando contratos de abastecimiento para el presente año con sus clientes industriales y que intentan permanentemente celebrar contratos superiores al año de duración, lo que hasta ahora ha tenido poca receptividad entre los clientes industriales.